Desde que me quedé sin trabajo, tengo mucho tiempo libre, que no dinero. Por eso me paso el día dentro de la biblioteca, me paso horas estudiando, leyendo. Me gusta la filosofía. Me he dado cuenta que ser un filósofo no es saber mucha filosofía, ser un filósofo es saber mucho de todo, historia, psicología, arte…por eso algo lo que puedo y leo todo lo que cae en mis manos. He de decir que en este año, me he dado cuenta de muchas cosas, los libros siempre dicen la verdad, al contrario que las personas, sobre todo lo cuentan desde una perspectiva que les permite hacerlo, normalmente el historiador no es víctima del evento histórico que narra, o el psiquiatra no es el que sufre la enfermedad, hay esa objetividad que toda ciencia necesita, para ser eso una ciencia. 
Ahora estoy leyendo a Freud y me he dado cuenta en que consiste el montaje de la policía que estoy sufriendo, leyendo el capitulo hoy dedicado a la paranoia me han dado ganas de llorar, he sentido mucha rabia. Lo mismo que sentí leyendo Ocupación, un libro dedicado a la ocupación Nazi de Francia durante la Segunda Guerra Mundial, con el que también me he sentido identificado.
Empecemos con la ocupación Nazi de Francia. Francia es un país dividido entre la derecha y la izquierda, es un país que sufre exactamente de lo mismo que sufre España. Los contrastes empezaron con la famosa Revolución Francesa, y ese sentimiento de división nacional parece que se hace patente en un momento tan trágico como es la Segunda Guerra Mundial. El ejercito francés no lucha de una forma cohesionada, está podrido como una madera llena de termitas. Francia pierde muy rápido la guerra y es ocupada. La población se divide, hay tres tipos de ciudadanos, los que apoyan la ocupación Nazi, por afinidad con el fascismo y por secundar la postura del Gobierno de Vichy, es mejor ahorrar vidas que luchar una guerra contra el Nazismo que se había ya perdido, según ellos Inglaterra tardaría poco en caer, los imparciales que sólo quieren que les dejen vivir en paz, y los desde que un primer momento forman la resistencia, se exilian, o se quedan en Francia y sabotean al ocupador. Para a mi la ocupación de Francia es un claro ejemplo de traidores y luchadores, los traidores son aquellos que apoyaron a los Nazis, los luchadores los que no se rindieron y siguieron luchando hasta al final. ¿Por que yo me siento identificado con Francia? porque a mi también me han traicionado, porque yo también soy víctima del fascismo, porque tengo la sensación de que mi entorno prefiere aliarse con mi poderoso enemigo antes que conmigo, que seguramente muchos ya me daban por muerto o loco años atrás. Pero aquí sigo, día tras día en la biblioteca, relato tras relato, post tras post, denuncia tras denuncia, ¿quién me iba a decir a mi que iba contar lo que me pasa a Naciones Unidas? No se si yo como a Francia le pasó, vendrán a salvarme los americanos, o los ingleses, o me dejarán morirme solo como nuestra pobre querida Segunda República a la que también traicionaron, dos veces, una Franco y otra por una división dentro del ejercito Republicano, que al final se rindió y se entregó a las manos de los fascistas, quien sabe que hubiera pasado si se hubieran enterado que aguantando sólo un poco más quizás la Segunda República hubiera sido salvada como Francia, porque hubiera sido involucrada dentro de la Segunda Guerra Mundial donde el fascismo que Franco representa perdió, contra todo pronóstico.
A mi también me quieren esclavizar los fascistas igual que esclavizaron a Francia, a mi me quieren esclavizar los fascistas que esclavizaron España durante toda la dictadura. Son los mismos, no otros, son esos que no ves, porque solo dicen lo que piensan en su casa. Pero son todos igual de sinvergüenzas, mentirosos, llenos de odio, asesinos. Esos son los que muchos votan a los que son como ellos, los que muchos acaban siendo policías, o jueces. Nazis disfrazados de una envoltura democrática, que voy a ser sincero y decirlo claramente, me parece una mierda, porque en España lo único que hay es corrupción que funciona a base de extorsión.
Voy a pasar a Freud. Freud es genial, es un crack, se le nota lo listo que es con dos lineas que leas. Yo empiezo a leer a Freud a partir de leer filosofía, Sartre, JULIA Kristeva, Judith Butler y pronto me doy cuenta de lo importante que es. Me encantó Totten y tabú y desde ahí quiero acabármelos todos. Pero la cuestión es, ¿a qué ahora tanto revuelo? Me estoy leyendo Estudios sobe Histeria. La histeria es una enfermedad mental, es una neurosis, es una representación física de un trauma, normalmente, siempre según Freud, es un trauma de contenido sexual que el ego reprime para no lidiar con él, y esa represión se transforma en un dolor físico. Pero el libro no acaba ahí, además trata otro tipo de enfermedades mentales, la verdad es muy complejo, si alguien ha leído a Freud sabrá de que hablo, y más que yo estoy haciendo el esfuerzo de leerlo en ingles, porque me gusta y por aprender el doble por lo mismo, y más si tenemos en cuenta que mi formación es de derecho no de psicología. Pero aún así he de admitir que me gusta, y me interese, y aunque a veces me tiro 20 minutos con una página y sudo lágrimas para entender una frase me lo leo. El caso, cuando he llegado a la enfermedad de la paranoia he dicho ¡ESO ES LO ME QUE ESTÁN HACIENDO ESTOS MALDITOS HIJOS DE LA GRAN PUTA A MI!, así con todas las palabras. Disculparme la sinceridad. Pero veamos porque:

  1. Entran a mi casa mientras estoy trabajando y torturan a mi perro.
  2. Me aíslan. Juro que mi familia es una mentirosa, que mi padre me extorsiona casi la ultima vez que lo vi. Mis amigos se que están compinchados con la policía, igual que lo sabe todo el mundo. 
  3. La trabajadora social que denuncio es una corrupta. Ella sabía que había pedido dinero a mis padres antes de yo contárselo, eso solo significa que la policía ya había hablado con ella.
  4. La policía me acosa y me sigue. Juro que me acosa y me sigue. Y lo sigue haciendo.
  5. Tengo la sensación de que todo el mundo lo sabe y se calla, eso es fácil de conseguir a base de extorsión y comprar favores, oposiciones, trabajo…que no te pasen cosas malas.
  6. La empresa donde trabajaba había corrupción. 
  7. Me siguen por la calle, me acosan a donde voy, y tienen agentes provocadores allá a donde estoy.

Lo voy a decir claramente, soy víctima de un montaje para dejarme como un loco, mis síntomas son muy parecidos a la enfermedad de la paranoia, pero en mi caso lo que me pasa está pasando de verdad. A mi me ha amenazado de muerte Raul de la Fuente Chiscano, el hermano policía de mi exjefa, que seguramente sea un corrupto, a mi mi padre me ha extorsionado diciéndome que no iba a volver a encontrar trabajo mientras él no quiera. Mis amigos están intimamente ligados con la policía, todo el mundo sabe de que hablo. A mi me han puesto un clavo en la rueda de mi moto, a mi me han clavado una llave en la rueda de mi moto, a mi Marta de la Fuente me dijo “eso te lo mereces” cuando le conté que me habían intentado echar de la carretera. 
Que puede decir. Son todos unos corruptos, y están haciendo parecer como que sufro una enfermedad mental. Y me han dejado solo, y lo peor, es que sé que nadie me quiere, al menos no lo suficiente para tener un par y enfrentarse conmigo a ellos y ayudarme sobre todo a dejar de estar solo, a tener a alguien en quien pueda confiar y contarle que me pasa, porque no lo tengo. Para mi eran los propios vecinos de donde vivía los que entraban en mi casa, los trabajadores de la empresa donde estaba sabían lo que me pasaba, mis amigos están en el ajo, igual que mi familia, no me puedo fiar de nadie, porque valgo más por lo que sé y lo que me han hecho, que lo que puedo ofrecer. 
Solo os digo, que tratéis en de poneros en mi lugar. Me siento continuamente vejado, maltratado, humillado, odiado. Me alimento a base de comida de un albergue. La policía, y mucha más gente no hace más que provocarme, porque sabe que estoy solo, y los que supuestamente me quieren han sido comprados y soy todo un caramelito. Comunista, pobre, nadie me quiere dar trabajo, enfrentado a todo el mundo. Y creanme cuando digo que me estoy mordiendo la lengua. Así es como nacen los terroristas, yo no soy uno. De eso estoy seguro. Me da mucha rabia ver a la gente feliz, con su trabajo, su pareja, su hijo, porque se que a mi no me dejan ser como ellos, y como mal, visto mal, me despiertan todos los días a las 5 la mañana para rezar, hace años que no sonrío y que no tengo pareja. Porque si yo estoy bien, la mitad de Madrid tenía que estar en la cárcel, supongo que por eso todo el mundo dice que estoy loco.
Solo quería desahogarme. Por cierto, no sabéis la rabia que siento cada vez que veo a un policía.